SESTAO RIVER CLUB
Lavín, Gago, Altair (Cabanas, min. 75), Murua, Arzamendi, De Eguino (Muñoyerro, min. 79), Villar, Eneko Rubio, Orozko, Parra y Etxaburu (Garmendia, min. 64).
DEPORTIVO ALAVÉS 'B'
Landeta, Huete, Ignacio Ruiz, Blanco (Alejandro, min. 65), Erik, Perera, Paulino (Víctor, min. 65), Arzuaga, Fuentes, Vuco (Iglesias, min. 46) y Valero.
GOLES: 0-1, min. 20: Paulino, de penalti.
ÁRBITRO: Etayo Herrera. Mostró cartulina amarilla a Eneko Rubio y Arzamendi, del Sestao River, y a Fuentes, Perera, Paulino y Alejandro, del Alavés B. Expulsó a los técnicos del Sestao Ibon Etxebarrieta y Kepa Martín.
CRÓNICA
Fin a la racha de victorias del River en un partido que estuvo condicionado por la señalización o no de varios penaltis, y por el acierto en la ejecución de los mismos desde los once metros. El filial del Alavés, por medio de Paulino y merced a una inexistente pena máxima, se adelantó en los primeros compases, en lo que fue su único tiro a puerta en todo el encuentro. El Sestao, por su parte, también disfrutó de un penalti en el minuto 60, pero Landeta adivinó la intención de Parra.
Los verdinegros llevaron la manija del choque en todo momento -alentados por unas gradas que presentaron un espectacular ambiente-, pero se toparon con una defensa blanquiazul muy bien ordenada, que no permitió al River generar tantas ocasiones como en anteriores partidos en Las Llanas.
La más clara en el primer periodo fue un remate de cabeza de Arzamendi ante el que Landeta sacó una buena mano. Además, se reclamó un posible penalti sobre Parra, que el árbitro no concedió -caldeando más el ambiente- y que supuso la expulsión por protestar tanto de nuestro técnico como del entrenador de porteros.
Tras el paso por vestuarios, el River salió con decisión y comenzó a acercarse al área rival con cierto peligro, hasta que llegó la desaprovechada jugada del penalti. A partir de ahí, el encuentro se enfrió y, pese a que el equipo lo dio todo, le costó crear oportunidades. Aún así, varios rechaces y algún disparo desviado en balones colgados al área pudieron haber servido para lograr el merecido tanto de la igualada, pero éste no llegó.